
Castillo de Monte-Cristo: Un refugio literario a las puertas de París
El Castillo de Monte-Cristo no es solo una visita cultural; es una experiencia íntima, poética y diferente.
A solo 50 km de París, en el corazón del bosque de Yvelines, se alza el Château de Rambouillet, un castillo que ha sido escenario de cacerías reales, refugio de presidentes y testigo de importantes capítulos de la historia de Francia.
El origen del castillo se remonta al siglo XIV, cuando Jean Bernier, tesorero del rey Carlos V, lo mandó construir como una fortaleza señorial. Con el paso del tiempo, el castillo fue transformándose en una elegante residencia, adaptándose a los gustos y necesidades de sus ilustres ocupantes.
En el siglo XVIII, el castillo alcanzó su esplendor gracias a Luis XVI, quien lo adquirió en 1783 como pabellón de caza. Irónicamente, la reina María Antonieta no compartía su entusiasmo por el lugar, llamándolo despectivamente “gothique et triste” (gótico y triste). Aun así, el rey mandó construir para ella la encantadora Laiterie de la Reine (Lechería de la Reina), una joya neoclásica dentro del dominio.
Durante la Revolución Francesa, el castillo fue nacionalizado, pero su historia no terminó ahí. En el siglo XIX, fue residencia temporal de Napoleón I y luego acogió a varios monarcas y presidentes franceses.
Ya en el siglo XX, Rambouillet se convirtió en residencia presidencial de verano, y fue escenario de eventos diplomáticos importantes, como la visita del presidente Kennedy en 1961 o la cumbre del G6 en 1975.
El castillo está rodeado por un extenso parque de estilo francés e inglés, ideal para caminatas y picnics. Además de la Laiterie de la Reine, destacan la Chaumière aux Coquillages (Cabaña de Conchas), una exótica sala de descanso adornada con conchas marinas, y los jardines históricos que evocan la vida cortesana del pasado.
Cuando Luis XVI adquirió Rambouillet en 1783 como residencia de caza, soñaba con que su esposa lo acompañara en sus escapadas. Pero María Antonieta lo encontró “gótico y lúgubre”. Para convencerla de quedarse, el rey hizo construir una hermosa Lechería de mármol (la Laiterie de la Reine)… ¡solo para que ella pudiera beber leche fresca con estilo! Aun así, ella siguió prefiriendo Versalles.
En el siglo XIX, Napoleón mandó crear el Bergerie Nationale (Redil Nacional) para promover la cría de ovejas merinas. Se convirtió en un centro agrícola modelo y sigue funcionando hoy como granja pedagógica. Dicen que en su época dorada, las ovejas de Rambouillet eran más famosas que algunos nobles.
Francisco I, el rey renacentista por excelencia, murió en el Château de Rambouillet en 1547. Se dice que sus últimas palabras fueron: “Todo está perdido, excepto el honor”, una frase que pasaría a la historia como símbolo del ideal caballeresco.
En 1975, el castillo fue sede de la primera cumbre del G6 (hoy G7), con líderes como Valéry Giscard d’Estaing, Gerald Ford y Helmut Schmidt. Rambouillet pasó así de pabellón de caza real a escenario de decisiones mundiales.
El castillo fue residencia de verano de varios presidentes franceses. Se cuenta que François Mitterrand hacía traer pan fresco desde París todos los días porque no le gustaba el pan local. ¡Una anécdota muy francesa!
Château de Rambouillet
78120 Rambouillet, Francia
En Tren:
🚉 Tomar la línea N del Transilien desde Gare Montparnasse → dirección Rambouillet
⏱️ Duración: aproximadamente 1 hora
🚶♀️ El castillo está a unos 10-15 minutos a pie desde la estación
En Coche:
🛣️ Aproximadamente 1 hora desde París (por la autopista A10 o N10)
🅿️ Hay estacionamiento disponible cerca del castillo y del parque
🏰 Castillo:
Abierto de miércoles a lunes
Horario: de 10:00 a 12:00 y de 13:30 a 18:00
Cerrado: martes y 1 de enero, 1 de mayo, 25 de diciembre
🌳 Parque y jardines:
Abiertos todos los días
Horario de verano: 8:30 a 21:00 (horarios varían según la temporada)
El Castillo de Monte-Cristo no es solo una visita cultural; es una experiencia íntima, poética y diferente.
Este castillo es un magnífico ejemplo del Renacimiento francés tardío, y un testimonio único de la relación entre Enrique II y Diana de Poitiers.