
Castillo de Monte-Cristo: Un refugio literario a las puertas de París
El Castillo de Monte-Cristo no es solo una visita cultural; es una experiencia íntima, poética y diferente.
A solo 45 minutos en auto desde París, se esconde uno de los secretos mejor guardados de Francia: el Castillo de Chantilly, un lugar que parece sacado de un cuento de hadas. Rodeado de bosques, jardines y lagos, este magnífico castillo no solo es una joya arquitectónica, sino también un viaje por siglos de historia, arte y elegancia.
El primer castillo fue construido en la Edad Media, pero la versión actual —la que te hará suspirar al verla reflejada en el agua— data del siglo XIX, reconstruido tras la Revolución Francesa. Fue el hogar de los príncipes de Condé y, más tarde, del duque de Aumale, un apasionado coleccionista que dejó un legado artístico sin igual.
Su amor por el arte convirtió a Chantilly en un museo: hoy alberga la segunda mayor colección de pintura clásica en Francia, después del Louvre. Aquí puedes admirar obras de Rafael, Poussin, Ingres y Delacroix, sin multitudes ni prisas.
¿Te imaginas pasear entre jardines diseñados por el mismo André Le Nôtre, creador de los de Versalles? En Chantilly, eso es posible. Los jardines franceses, con sus simetrías y fuentes, se combinan con zonas más románticas, como el jardín anglo-chino o el jardín inglés.
Cada rincón invita a soñar, sacar mil fotos y simplemente disfrutar del silencio, la naturaleza y la belleza
Chantilly también es sinónimo de caballos. Aquí se encuentran las Grandes Caballerizas, una maravilla del siglo XVIII que hoy alberga el Museo del Caballo. Si vienes en el momento justo, puedes asistir a espectáculos ecuestres que combinan arte, danza y tradición.
Cuenta la leyenda que fue en estas cocinas donde nació la crema Chantilly, esa delicia dulce, ligera y espumosa que hoy acompaña postres en todo el mundo. Y no hay mejor lugar para probarla que en su tierra natal, en un salón de té con vista al castillo.
Nosotras —Carla y Andreita— te llevamos no solo a ver el castillo, sino a vivirlo Aquí.
🌷 Te contaremos sus secretos,
🎨 te guiaremos por sus obras maestras,
🐎 te mostraremos sus caballos encantadores,
🍰 y compartiremos contigo una pausa dulce en los jardines.
Todo a tu ritmo, con cariño, historia y mucha pasión por Francia
Reserva tu lugar y acompáñanos en esta escapada real, tan cerca de París… y tan lejos del mundo moderno

El Castillo de Monte-Cristo no es solo una visita cultural; es una experiencia íntima, poética y diferente.

Este castillo es un magnífico ejemplo del Renacimiento francés tardío, y un testimonio único de la relación entre Enrique II y Diana de Poitiers.
